La tecnología ha traído grandes beneficios pero también ha tenido un impacto negativo en el medio ambiente. El verdadero deterioro del medio ambiente comenzó con la Revolución Industrial y el descubrimiento de los combustibles fósiles, lo que llevó a la contaminación ambiental. Hoy en día, el rápido crecimiento de la población y el desarrollo tecnológico someten al medio ambiente a una gran presión, reduciendo su calidad y capacidad para sustentar la vida. Un ejemplo es el crecimiento