ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
Ejemplo de síndrome del emperador
1. Ejemplo de Síndrome del emperador
El síndrome del emperador es el trastorno de personalidad del niño. En él los niños desafían la
autoridad de los padres y les pierden toda forma de respeto. Luego terminan faltándoles al respeto a
todos los que los rodean. También se llama trastorno negativista desafiante.
En este trastorno el niño cree tener la autoridad suficiente para mandar y desafiar primero a los
padres y después a todo el que lo rodee. Maltratan, desobedecen, escandalizan, molestan
deliberadamente a otros. Enfurecen frecuentemente y sin sentido. Exigen atención y mimos y al no
obtenerlo suelen ser vengativos y agresivos. Son celosos y maltratan al objeto de sus celos,
generalmente hermanos menores.
Discuten aun con los adultos y rechazan obedecer cualquier orden o petición que estos les den. Culpan
a los demás por cualquier error suyo y nunca asumen responsabilidades verdaderas. Generalmente
están enojados, o molestos. Suelen guardar resentimientos y deseos de venganza, la cual muchas
veces llevan acabo sin medir consecuencias.
Pueden desquitarse maltratando a los animales o a niños pequeños. Rompiendo o robando cosas que
saben estiman los adultos a los que desafían, como escondiendo las llaves, los lentes, el bolso o
cualquier otra pertenencia de sus padres. Si conocen algún secreto de los padres no dudan en
utilizarlo en contra de estos. Mienten y critican sin tocarse el corazón, exigen cosas que están fuera
del presupuesto económico de los padres, y no los dejan tranquilos hasta que se las dan.
Para que el trastorno negativista desafiante o síndrome del emperador sea debidamente
diagnosticado, debe tratarse de alguien menor de dieciocho años, durar por lo menos seis meses con
esta irritante actitud. Y los trastornos deben sobrepasar lo normal en niños con su edad y su
desarrollo. También deben tenerse cuatro de estas características para que cumpla con este
trastorno. Todas estas conductas deben ser independientes del estado de animo del niño o de que
padezca algún trastorno sicótico. No es lo mismo que el trastorno disocial y tampoco antisocial si se
trata de alguien mayor de edad.
Algunas personas consideran que el síndrome del emperador es provocado por padres permisivos y
sin espíritu, que comienzan consintiendo al hijo dándole las cosas sin que se esfuerce, evitándoles
cualquier sufrimiento y permitiéndole seguir conductas que más tarde ellos lamentaran. Le permiten
hacer berrinches en publico, maltratar a los demás llegando a la agresión física, y la forma que
adquieren los padres para calmarlos es obedecerlos y consentirles sus caprichos, con lo que los niños
refuerzan su conducta destructiva.
Generalmente son niños que en algún momento fueron o siguen siendo muy mimados por los adultos,
y que en algún momento esa atención desaparece o es insuficiente para ellos y buscan tener el control
del adulto para sus propios fines. En otras ocasiones es uno de los padres quien se ve reflejado en el
hijo y lo mima en extremo, convirtiendo al niño en un tirano.
Muchos de estos niños al no ser corregida su actitud, crecen con una actitud antisocial, la cual puede
empeorar en casos extremos, a formas de criminalidad. Por eso es indispensable que los padres los
lleven a terapia. Según el criterio del terapeuta los padres consentidores y doblegados también
necesitaran terapia para poder volver a tomar el control de la familia y ayudar al hijo a resolver esta
conducta, ya que sin atención, la situación suele volverse mucho más violenta llegando los hijos a
golpear a los padres y a los que los rodean, e incluso a matar al objeto de sus celos, ya sea uno de los
padres, hermano, primo o cualquier pequeño que distraiga a los adultos de atenderlo.
Ejemplo de síndrome del emperador:
Esta actitud se puede observar en la película the good son o “el ángel malvado”; en este filme, el
hijo (Macaulay Culkin) es Henry, quien en un momento dado, trata de matar a su hermana, a su
madre y a primo Mark (Elijah Word); quien es capaz de descubrirlo.
La capacidad de Henry u su amplio coeficiente intelectual aceleran los daños producidos por el vació
emocional dejando claro lo que un niño que padece síndrome del emperadorpuede llagar a hacer.