El documento presenta la misión y visión de reclutar jóvenes para formar una red de oración y levantar una cadena nacional de oración. Su justificación es que los jóvenes cristianos tienen una guerra espiritual y deben militar en la oración. La meta es integrar al 30% de la membresía juvenil local en el Ejército de Oración, un grupo que ora por la iglesia y promueve la disciplina espiritual.