El agua es un recurso fundamental en España, donde se utiliza principalmente para la agricultura (80%), la energía (6.4%) y el consumo urbano (14%). Aunque hay un balance hídrico positivo, existen problemas como la irregularidad de los ríos, la escasez en la región mediterránea y la insuficiencia de pantanos. La política hidráulica busca aumentar los recursos, prevenir inundaciones y mejorar la calidad del agua a través de planes hidrológicos, embalses y trasvases entre cuenc