El homeschooling surgió originalmente en Estados Unidos y se extendió a otros países como una alternativa a la educación tradicional por razones religiosas, culturales o de desacuerdo con el currículum oficial. En Argentina, alrededor de un millón de niños recibían educación en el hogar en 1996. Mientras que los padres defienden su derecho a determinar el currículum y proteger a los niños, la ley argentina establece la educación obligatoria y negar la socialización con otros niños puede aislarlos y quitarles