El documento contrasta las características de dos entidades opuestas: Satanás y su reino de demonios, que engañan y atrapan a los hombres con temores y vicios para oponerse a Dios, versus la Iglesia de Jesucristo, que ofrece dones, promesas aquí y en el más allá, vida con propósito y autoridad sobre las fuerzas del mal.