El proceso etnográfico implica la observación participante a largo plazo para describir una realidad desconocida. Siguiendo a Aguirre 1995, el proceso etnográfico tiene un diseño emergente donde la recopilación y análisis de datos determinan cómo se construye la investigación, a diferencia de la investigación cuantitativa que tiene etapas predefinidas. El proceso etnográfico no es lineal sino que sigue un modelo cíclico o en espiral donde los objetivos e instrumentos pueden redefinirse.