El documento habla sobre la necesidad de ser valiente para heredar el reino de los cielos. Indica que los cobardes no heredarán el reino, y que Dios necesita gente valiente que esté dispuesta a enfrentar dificultades y tentaciones. También señala que David transformó la vida de un grupo de personas problemáticas uniéndose a él y enseñándoles a ser valientes. Exhorta a los creyentes a juntarse con personas valientes que los ayuden a dejar atrás la cobardía.