El documento describe el cambio del teocentrismo al antropocentrismo durante el Renacimiento. Factores como el contacto con la cultura árabe, la fundamentación en Aristóteles, el naturalismo y el valor de la razón llevaron a concebir al hombre como la medida de todas las cosas y centro del universo en lugar de Dios. La fe dejó de dominar la vida política, cultural y económica para dar paso a la razón y el bienestar y la salvación se buscaron en la tierra en lugar del cielo.