El sirenito conoció a una amiga sirena aventurera. Un día cuando observaban un barco pirata, apareció un pulpo-calamar gigante que atacó el barco y dejó atrapado al sirenito debajo de los escombros. Su amiga lo ayudó y huyeron del pulpo, escondiéndose detrás de una roca, pero finalmente la amiga tuvo que golpear al pulpo para que los dejara en paz. Después celebraron con un festín y más tarde se casaron y tuvieron hijos.