El documento describe seis maneras en que los cristianos deberían usar el Antiguo Testamento: 1) Para investigar los orígenes, 2) Para probar la deidad de Jesús, 3) Para entender símbolos, 4) Para comparar los pactos, 5) Para contrastar los pactos, 6) Para aprender de los ejemplos. El Antiguo Testamento revela los orígenes del mundo y la humanidad, demuestra que Jesús es el Hijo de Dios, y ofrece ejemplos para vivir en obediencia a Dios hoy en día.