El documento discute la naturaleza de Jesucristo según las Escrituras. Argumenta que Jesucristo no era divino ni coeterno con Dios, sino el Hijo mortal de Dios que resucitó para ser el Mesías prometido e interceder por la humanidad. Explica que Jesús nació de María como un ser humano para ser el cordero sin mancha que expiaría los pecados, pero que vivió sin pecado para compadecerse de la humanidad.