1. El Uso del Punto.
El punto es el signo de puntuación que genera
la pausa más larga con relación a los demás
signos de puntuación.
Para expresar ideas completas se utilizan los
siguientes tipos:
Punto y seguido. Tiene como función separar
ideas completas pero que están relacionadas.
Después de este tipo de punto, la siguiente idea se
escribe en la misma línea y se comienza con
mayúscula.
2. Ejemplo: aunque me di prisa y llegué al cine
corriendo, la película había comenzado. En el salón
oscuro traté de encontrar un sitio. Quedé junto a un
hombre de aspecto distinguido.
(Arreola. Confabulario.)
Punto y aparte: se usa para indicar que se
desarrolló una idea o pensamiento de forma
completa. Después de este signo se escribe en una
línea diferente. Se puede desarrollar la misma idea
desde otro enfoque o cambiar de idea.
Ejemplo:
La palidez de mi amigo no era insólita. Con los
años, la piel de su rostro se unión al hueso y cuando
movía las manos delgadas la luz las atravesaba sin
pena.
Lo había visto cuando regresó de un viaje a
México y entonces su aspecto de fantasma
3. civilizado se disipó. El sol le dio espesor, presencia
carnal. Casi no lo reconocí.
Ahora, al recobrar su palidez habitual, debí
recordarlo claramente; pero en su manera había
algo desacostumbrado. Fui a saludarlo cuando lo vi
solo en su mesa del comedor del club y le propuse
que almorzáramos juntos.
(Carlos Fuentes. Una familia lejana)
Punto final: este punto significa que el texto se
finalizó.
Además de los usos del punto mencionados,
este también se utiliza en la abreviatura:
Ejemplo:
Ud.
núm.
Dr.
Referencia Bibliográfica
Romero, A. M. L (1991).
Técnicas Modernas de
Redacción. México: Harla.