Un hombre en Australia generó una descarga eléctrica estática de 40.000 voltios mientras caminaba, quemando la alfombra y derritiendo plástico a su paso. Esto obligó a los bomberos a evacuar el edificio. La persona no se dio cuenta que sus ropas de lana y nylon estaban generando una carga eléctrica al rozarse, y al entrar al edificio la descarga incendió la alfombra.