Las extremidades se desarrollan a partir de los miembros, que son estructuras que se forman en los lados del cuerpo del embrión temprano. La regulación de genes y proteínas específicas controlan el crecimiento y la diferenciación de los miembros en las extremidades superiores e inferiores. La pérdida o alteración de estos genes y proteínas puede dar lugar a defectos congénitos en las extremidades.