Artículo revista Energiminas Mayo 2017. Los proyectos de generación renovable con fuentes no convencionales, como la eólica y la fotovoltaica, entre otras, pueden ser impulsados por una de las industrias más importantes del Perú, LA MINERÍA. Entrevista al Dr. Arnoldus M. van den Hurk y el Ing. José Estela en noviembre de 2016
1. INFORME
ENERGÍA“VERDE”
PARALAMINERÍALOS PROYECTOS DE GENERACIÓN RENOVABLE CON FUENTES NO
CONVENCIONALES, COMO LA EÓLICAY LA FOTOVOLTAICA, ENTRE
OTRAS, PUEDEN SER IMPULSADOS POR UNA DE LAS INDUSTRIAS MÁS
IMPORTANTESY CUESTIONADAS DEL PAÍS.
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2. INFORME
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l 2016 será recordado como el año en
que las energías renovables no conven-
cionales alcanzaron precios bastante
competitivos logrando imponerse a la
generación térmica en licitaciones de
Chile y Perú.
Pero el camino de estas fuentes
para seguir aumentando su eficiencia
y bajando los precios parece no tener
fin. José Estela, gerente general de la
consultora SAMI Energy, anota que el
mayor impulso a las energías renova-
bles surge del rol protagónico que tie-
nen en todas las estrategias para mitigar
el denominado Cambio Climático.
La preocupación de los gober-
nantes por evitar que la temperatura
del planeta siga aumentando, se
plasmó en un acuerdo sellado en la
vigésimo primera “Conferencia de
las Partes” (COP21) realizada en Pa-
rís en el 2015. Pero algo incierto es
el futuro de dicho acuerdo tras la lle-
gada del magnate Donald J. Trump
a la Casa Blanca. El millonario y
polémico empresario sostiene que
el Cambio Climático es un “invento
de los chinos”, y en marzo de este
año firmó un decreto para impulsar
las energías fósiles antes que las re-
novables, contrario a lo que hace el
resto del mundo. Si Estados Unidos
desconoce el acuerdo de París en
favor del medioambiente sería un
retroceso que no debería ser imitado
por otros países.
Con todo, la industria de las
energías renovables ya es sólida y
sigue avanzando y sorprendiendo
con tecnologías cada vez más acce-
sibles y útiles que son rápidamente
acogidas por sectores que tienen
elevada demanda de energía, como
la minería.
E
3. 86 MAYO 2017 / Nº 55
INFORME
INDUSTRIASRELACIONADAS
Arnoldus Van den Hurk, líder del grupo de
expertos del Observatorio Internacional de
las Energías Renovables para la Minería
(REMIO, por sus siglas en inglés), estima que
la minería consume el 10% de toda la energía
eléctrica del mundo y proyecta que esa de-
manda llegará al 15% entre el 2030 y el 2040.
En cuanto a nuestro país, el especia-
lista calcula que en 20 años la minería
demandará el 75% de toda la energía que
consumen los peruanos en la actualidad y
que ese apetito no dejará de crecer con el
tiempo porque cada vez será más compleja
la extracción de la riqueza del suelo.
Esos potenciales escenarios y el cum-
plimiento del nuevo acuerdo por el planeta
fortalecerá más la estrecha relación entre
la minería y las energías renovables, según
Van den Hurk.
Mientras las fuentes renovables son
vistas como panacea por los ambienta-
listas, la minería es percibida como una
industria que ocasiona severos impactos en
su entorno y grandes cantidades de nocivos
residuos. Y es que la mayoría de la pobla-
ción peruana y global no tiene noción del
nivel de dependencia existente entre ambos
rubros ni de las posibilidades que tienen
para crecer apoyándose mutuamente.
Van den Hurk estima que si todas las
centrales térmicas a carbón del mundo, que
son las que producen mayores emisio-
nes contaminantes, fueran reemplazadas
por parques solares y fotovoltaicos, se
necesitarían, de plano, unas 240 millones
de toneladas de cobre para construir todos
los equipos, sistemas y tecnologías que
requerirían las centrales “verdes”.
Esto, agrega el experto, no considera
la inminente demanda de cobre, zinc y
plomo que tendrán los fabricantes de autos
eléctricos para producir las baterías y equi-
pos de la que se perfila como la solución
para tener un transporte que no dependa de
combustibles fósiles (salvo que la electri-
cidad provenga de una central térmica, lo
cual es una discusión paralela).
“Una tercera parte de la demanda
de cobre, en unos cuatro a cinco años,
dependerá sólo de las baterías de coches
eléctricos”, calcula Van den Hurk.
Pero la más prometedora relación
entre las renovables y la minería se da en
el ámbito de la promoción y ejecución
de proyectos. Gigantes como Apple,
Google y Amazon abastecen su deman-
da eléctrica íntegramente con fuentes
renovables no convencionales e incluso
tienen subsidiarias con las que venden
los excedentes a otras empresas. Lo que
se inició como un esfuerzo por ser más
“amigables” con el planeta se convirtió
en un negocio interesante.
Este esquema ha sido aplicado en la
minería peruana básicamente con pro-
yectos hidroeléctricos. Firmas como la
Compañía de Minas Buenaventura, Vol-
can, Consorcio Minero Horizonte y San
Ignacio de Morococha, por mencionar los
casos más conocidos, han impulsado la
construcción de centrales hidroeléctricas
de pequeña y mediana envergadura a
través de subsidiarias y de forma directa.
Así han logrado alimentar, en parte, la
voraz demanda de energía de sus chanca-
doras y molinos, además de constituir un
negocio eléctrico.
La construcción de proyectos de
energías renovables no convencionales
se dio hace menos de una década con
la implementación de las denominadas
“Subastas RER”. Actualmente operan en
el Perú tres centrales de biomasa (una es
activada con bagazo y dos con gas meta-
no producido por la descomposición de
basura), cuatro parques eólicos y cinco
granjas solares que generan alrededor de
330 megavatios (MW). Poco más de un
tercio de esa electricidad, calcula José
Estela, es consumido por la industria
minera, debido a su cercanía geográfica.
A estos proyectos se suma una larga lista
de pequeñas centrales hidroeléctricas de
tamaño menor a 20 MW que suman en
total cerca de 300 MW.
El esquema peruano considera,
además de subastas que se realizan cada
dos años, un despacho preferencial en el
sistema eléctrico nacional al ser solu-
ciones eficientes y a pesar de tener una
generación que depende de que haya luz
del sol, en el caso de la solar fotovoltai-
ca, y fuerza del viento, en lo referente a
la eólica.
SEVERA DISTORSIÓN
El mayor cuestionamiento surge por el
cargo especial que pagan los usuarios
finales por esta generación “verde”, el
cual se suma a una lista de asignaciones
que fueron impuestas por el Estado a la
tarifa regulada (que es la que pagan todos
los hogares) para promover grandes
hidroeléctricas, líneas de transmisión,
generación térmica, la ejecución del
gasoducto al sur, entre otros. Todo esto
ha causado una severa distorsión en el
mercado eléctrico peruano que debería
ser resuelta por el gobierno de turno.
La pregunta que subyace es: ¿podrían
las mineras apostar por la generación fo-
tovoltaica y eólica tal como lo han hecho
con la hidroelectricidad?
José Estela asegura que en la medida
que se corrija la distorsión en los precios
de la electricidad, que sigan disminuyendo
los precios de la energía eólica y fotovol-
taica, y que se les deje competir en igual-
dad de condiciones, las mineras optarán
por firmar contratos con desarrolladores
de proyectos con esas tecnologías para
abastecer a sus operaciones, abrir nuevas
líneas de negocio pensando en aumentar
sus utilidades o para darle valor a sus
inversiones en el cierre de minas.
“En los próximos cuatro a cinco años,
los mineros se acercarán más a las reno-
vables”, pronostica Estela.
El presente de la matriz eléctrica
peruana se soporta en la generación
hidroeléctrica y en la térmica con gas
natural, que es el hidrocarburo que origina
menos emisiones contaminantes. Esto tie-
ne sus riesgos en caso de grandes lluvias,
grandes sequías o de que ocurra algún
daño al único ducto de gas existente.
JOSÉ ESTELA, GERENTE GENERAL DE LA
CONSULTORA SAMI ENERGY Y ARNOLDUS
VAN DEN HURK, LÍDER DE REMIO.
4. 87MAYO 2017 / Nº 55
INFORME
Los funcionarios del Ministerio de
Energía y Minas (MEM) y de las institucio-
nes ligadas al rubro señalan, con no poca
razón, que la matriz peruana tiene un equi-
librio eficiente que permite lograr precios
bajos por la electricidad y ser amigable
con el ambiente. Sostienen, asimismo, que
se puede ir avanzando a paso lento con las
renovables no convencionales viéndolas
más como un complemento de pequeña
participación.
Los promotores de la energía eólica
y fotovoltaica discrepan y destacan que
los bajos precios y crecientes factores de
planta que han alcanzado esas tecnologías
las ponen en condiciones de competir con
las hidroeléctricas y térmicas. A ello se
suma, según Estela, la creciente dificultad
para llevar adelante centrales hidroeléctri-
cas de gran tamaño. El rechazo social y el
fuerte impacto ambiental que ocasiona la
construcción de las represas y las eventua-
les inundaciones son dos de las principales
causas que frenan la ejecución de proyectos
de este tipo, anota el consultor energético.
POTENCIA FIRME
Para que pueda darse la competencia entre
las tecnologías de generación todas deben
ofrecer una “potencia firme” (promedio de
la cantidad de energía que pueden entregar
al sistema en cualquier momento), pero
sólo la generación térmica y la hidroeléctri-
ca tienen un porcentaje definido, mientras
a las fuentes renovables no convencionales
se les asigna un valor igual a cero por su
intermitencia.
Al respecto hay diversas posturas.
Algunos promotores de las renovables
señalan que es momento, en base a la ex-
periencia local con esas fuentes, de asignar
una potencia firme a la eólica y fotovol-
taica tal como ha ocurrido en otros países;
mientras funcionarios del organismo
regulador de las inversiones en energía, el
Osinergmin, sostienen que no sería posible
hacer tal cálculo.
Desde hace más de un año el MEM dio
a conocer que siguen estudiando una fór-
mula para asignar una potencia firme a las
renovables no convencionales. La última
subasta RER se llevó a cabo a inicios del
2016 y se adjudicaron 13 nuevos proyec-
tos: dos de biomasa, tres parques eólicos,
dos plantas fotovoltaicas y seis hidroeléc-
tricas pequeñas.
Todavía no maduran los proyectos
geotérmicos a pesar de contar con factores
de planta mayores a 90% y que ya se ha
explorado e identificado lugares donde se
puede realizar este tipo de iniciativas. Es-
tela considera que se requerirá sincerar los
precios de esta fuente renovable para poder
impulsar proyectos.
Una eventual asignación de potencia
firme a las renovables no convencionales
requerirá que primero las autoridades del
sector energía ordenen el mercado eléctrico
y sus precios, y que en la futura planifica-
ción de la matriz brinden mayor protago-
nismo a las fuentes renovables o “verdes”.
Eso es algo que implicaría restar
importancia a la generación termoe-
léctrica con gas, al tratarse de una
tecnología fósil y de un recurso
finito que puede destinarse al
uso domiciliario e industrial mediante
petroquímicas. Ese eventual escenario será
motivo, sin duda, de discusiones económi-
cas y políticas.
EVANGELIZACIÓN
Por el lado de las mineras se necesita tam-
bién un mayor conocimiento del positivo
impacto económico y ambiental que traen
las renovables no convencionales. Esa
labor es la que promueven consultores
como Estela y Van den Hurk quienes lleva-
ron adelante el II Congreso Internacional
de Energía Renovable para Minería y un
Seminario en el Perú para impulsar, en pa-
labras de Estela, la “evangelización” de los
empresarios mineros en todo lo relacionado
a energías renovables y la de los técnicos
en esta materia para que conozcan todo lo
relacionado a minería.
Una de las industrias más importantes
y cuestionadas del país, como es la mine-
ría, puede ser la palanca que dé un fuerte
impulso a la energía solar y a la eólica,
además de las hidroeléctricas. Pero eso
requerirá cambiar el chip de los mineros
quienes, al igual que cualquier empresario,
no invierten dinero si no están convencidos
de los beneficios globales, de la rentabi-
lidad y de la oportunidad de negocio que
ofrecen las renovables a corto, mediano y
largo plazo.