La Asamblea Nacional de Ecuador aprobó reformas al Código Orgánico Integral Penal para tipificar el femicidio, sicariato, etnocidio y homicidio como delitos. El femicidio, definido como el asesinato de una mujer motivado por violencia doméstica u odio irracional, será sancionado con hasta 26 años de cárcel. Estas reformas fueron impulsadas por el caso de Karina del Pozo, una joven asesinada cuya muerte no pudo ser juzgada como femicidio. Expertos apoyan

1. ASAMBLEA
PENALIZAN EL FEMICIDIO
En segundo debate, la Asamblea Nacional de Ecuador, aprobó la incorporación de nuevas figuras
en la reforma al Código Orgánico Integral Penal (COIP), que tipificará al femicidio, sicariato,
etnocidio y homicidio como delitos.
El feminicidio es el homicidio realizado contra una mujer motivado por Violencia Doméstica o por
un odio irracional que lleve a matar mujeres por el simple hecho de serlo y que, según lo
aprobado en el COIP, será sancionado con cárcel de hasta 26 años.
El tema de la violencia contra la mujer ha estado en boga en el país desde el pasado 20 de febrero,
cuando se encontró el cadáver de la joven Karina del Pozo, de 20 años, con signos de violencia
sexual y cruel asesinato. En este caso, al no estar tipificado el femicidio, el tribunal lo juzgó como
asesinato, basado en el artículo 450 del Código Penal.
Frente a este caso, el gobierno abogó para que el delito de feminicidio, hasta ese entonces no
tipificado en las normativas del país, pueda ser condenado con hasta 35 años de cárcel,
dependiendo del grado de agresión.
Sobre este tema, Nimia Macías, asesora de ONU Mujeres en el país, manifiesta su aceptación en
torno a la incorporación del femicidio al COIP y que éste sea penalizado, ella opina que esto
ayudará a que disminuyan los índices de muertes de mujeres en manos de sus conocidos.
Por su parte, el abogado penalista Patricio Torres habla de que en la legislación ecuatoriana el
concepto de femicidio como tal, es novedoso y que generalmente a las personas que atentan
contra la vida de una mujer, se las puede sancionar bajo la figura legal de homicidio o asesinato,
según las circunstancias que están plenamente establecidas en el Código Penal.
Coincide con la aceptación de la penalización y el tiempo que se da como condena al agresor, más
aún, cuando la misma Constitución en el artículo 11, numeral 2, establece que nadie puede
discriminar a otra persona por motivos de etnia, religión o sexo, entre otras. Agrega que en
nuestra sociedad existe el machismo, que lleva al hombre a sentirse superior a la mujer, aún
cuando legal y constitucionalmente, tanto los hombres como las mujeres, gozan de los mismos
derechos.