El fenómeno del Niño es un calentamiento anormal de las aguas del Océano Pacífico que afecta el clima de Sudamérica, sureste asiático y Australia. Se produce cuando las corrientes de agua cálida viajan desde Australia hasta Perú entre enero y marzo, causando lluvias intensas, sequías, pérdidas agrícolas y pesqueras, y enfermedades. Para prevenir sus efectos, es importante reforzar techos, proteger conexiones eléctricas y hacer zanjas en tierras de cultivo.