La Tierra se formó hace 4500 millones de años a partir de una nebulosa de polvo y gas que dio origen al sistema solar. Inicialmente era una masa incandescente cuya corteza se fue solidificando. Los volcanes aumentaron el espesor de la corteza y generaron gases que formaron la atmósfera primitiva. Impactos meteoríticos produjeron agua líquida que evolucionó a la atmósfera actual. Existen dos teorías sobre el origen de los planetas: la acreción del núcleo, que explica la formación de