Este poema describe un himno gigante y extraño que el poeta ha escuchado en la noche del alma y que anuncia una nueva aurora. El poeta intenta escribir las cadencias de este himno a través de las páginas, pero le resulta difícil dominar el idioma para capturar con palabras a la vez suspiros, risas, colores y notas musicales. El poema solo podría expresarse completamente cantándoselo al oído de su amada mientras sostiene sus manos.