1. "Determina practicar lo que lees. Los cristianos deberían ser Biblias andantes
que viven las verdades allí escritas. La Palabra no es sólo guía para el
conocimiento, sino también una guía para la obediencia. Una lectura santa de
la Palabra de Dios produce que huyamos de los pecados y que practiquemos
los deberes que se nos ordenan." -Thomas Watson
"Recuerda, no es la lectura apresurada de verdades santas y celestiales - sino
la meditación seria en ellas lo que las hace dulces y provechosas para el alma.
No es el mero toque que la abeja hace a una flor lo que produce la miel - sino
su permanencia por más tiempo sobre la flor lo que le permite extraer el dulce.
El cristiano más escogido, dulce, sabio y fuerte no será aquel que lee más,
sino aquel que medita más." - Thomas Brooks
“Lo que todos sus discípulos deben aprender es que ser un seguidor de Jesús
conlleva una renuncia dolorosa de los intereses personales y una vuelta de
todo corazón a los intereses de Jesús.”— D. A. Carson [For the love of God:
A daily companion for discovering the riches of God ' s Word. Volume
1 (February 5). Wheaton , Ill. : Crossway Books.]
"Aunque Elí conocía al Señor, agradar a sus hijos era más importante que honrar a
Dios (1 Sam.2:29). Aunque probablemente nunca lo dijo,
sus acciones hablaban más alto que sus palabras. Elí pensaba más en la paz de su
hogar que en la paz con Dios, y por eso descuidó su deber y trajo
deshonra al Señor. El placer de tener una relación placentera con sus hijos
funcionaba como su dios. Sirvió a este querido ideal e ignoró los mandamientos
de Dios a disciplinar a sus hijos. Elí, el sacerdote de Dios, era un idólatra. Aunque no
se postraba ante imágenes de piedra, se postró ante las
demandas de sus hijos—aun cuando entraban en conflicto con las de Dios." —Elyse
Fitzpatrick (Idols of the Heart, p.35)