Azorín acompaña a un doctor en una visita a familias pobres que viven en casas deterioradas para realizar exámenes médicos. El doctor se esfuerza por dar esperanza a los pacientes, pero parece agotado. Azorín observa que la mayoría de los enfermos están desnutridos y tienen tuberculosis, debido a la pobreza y falta de alimentos. Proporciona estadísticas que muestran altas tasas de mortalidad por tuberculosis y otras enfermedades relacionadas con la pobreza en la zona entre 1890 y 1903.