Los lípidos cumplen funciones energéticas a mediano y largo plazo al servir como reserva de combustible metabólico. Se clasifican en lípidos simples como ácidos grasos y glicerol, lípidos compuestos como fosfolípidos, aceites y grasas, y lípidos complejos como glicolípidos y esteroides. Sirven para aislamiento térmico y como componentes estructurales de membranas celulares.