1. El Síndrome de
Asperger
Intruduccion:El síndrome de asperger o trastorno de asperger es un conjunto de
problemas es un tipo relativamente reciente de Trastorno del Desarrollo que también se
englobaría dentro del espectro autista. Hans Asperger, pediatra austriaco, en los años 40,
fue el primero que describió con exactitud el conjunto de síntomas que caracterizaba a un
conjunto de niños que no acaban de cuadrar bien en el diagnóstico del autismo clásico (el
descrito por Kanner). A partir de 1994, el Síndrome es reconocido como entidad propia
por el D.S.M.-4 (Manual estadístico de diagnóstico de Trastornos mentales). Sin
embargo, todavía hoy, sigue habiendo un amplio debate teórico sobre si el S.A. puede
considerarse un trastorno independiente del Trastorno Autista o si se trata del mismo
trastorno en su versión de mayor rendimiento (menor afectación). Además existen ciertas
discrepancias entre profesionales de la psicología, psiquiatría y pedagogía acerca de los
criterios que se deben incluir/excluir a la hora de efectuar el diagnóstico. Normalmente la
diferencia básica reside en la mayor competencia en el desarrollo del lenguaje y las
competencias intelectuales que presentan los asperger respecto a los autistas clásicos.
2. Presentación del caso:
Leonardo caracol farfán .soy una persona q vive con el llamado síndrome de
asperger A veces cuando deseo hablar de esto que vivo, siempre reflexiono sobre la forma
de empezar, ¿cuál sería la manera adecuada de hacerlo?, decir de inmediato que soy una
persona que vive con el llamado Síndrome de Asperger u ocultarlo y usar las palabras de
forma tan normal, que al final al momento de desvelar mi verdad pueda provocar un efecto de
sorpresa, evidentemente hoy al escribir esto, creo que opté por la primera opción, tal vez
pensando en que pueda perdurar en estas hojas, quiero partir siendo sincero, he vivido 38
años de mi vida (es decir toda) llevando conmigo a “Mi Asperger”, si bien no nos conocimos
desde el comienzo, el siempre estuvo ahí, haciéndome pensar diferente (por lo general de una
manera que raya en la genialidad) u otras confundiéndome entre tantas palabras que dicen
cosas que no es exactamente lo que oigo.
Yo y mi Asperger, hemos intentado conocernos desde que tomamos conciencia el uno del
otro, hemos avanzado y a veces por cierto retrocedido, hemos encontrado soluciones juntos y
otras lo he tenido por descartado y lo he alejado de ciertos lugares donde es mejor que él no
opine. Poco a poco camino con él, avanzo en un mundo que me llena de luces que
enceguecen, de sonidos que me irritan (odio el tic tac de un reloj en la noche o una gotera
nocturna riéndose cuando no concilio el dormir), moviéndome en un mundo que a veces debo
mirar dos veces para ver lo que es realmente, escuchar dos veces para entender lo que me
dicen. Y a veces tres. De apariencia parezco distante, silencioso e inexpresivo, porque lo soy,
he aprendido a ser cordial, a intentar dibujar sonrisas y hablar cosas en reuniones sociales o
cuando el silencio me aflige tanto que debo necesariamente decir que “hoy hizo frío en la
mañana”. He aprendido de mis errores pues soy consciente que yo y mi Asperger no somos
comprendidos. en muchas oportunidades con mis expresiones algo “ácidas”, “directas”, pero
en el fondo sinceras, creo que muchas veces la gente prefiere oír una mentira que les agrade
a una verdad evidente que todos dirán a sus espaldas, pero he aprendido a mentir (requiero
que sea muy premeditada, pero mentira al fin) algo “bueno” que me enseñó vivir entre ti, entre
ellos.
Yo y mi Asperger hemos amado, hemos abrazado, mirado la luna y el mar, entregado a ciertas
personas intensa y totalmente, y si, también nos han roto el corazón, Yo y Mi Asperger fuimos
padre de un niño hermoso, de Vicente…(guardo tres puntos suspensivos, porque en realidad
ahora reflexiono en silencio, en que creo que amo intensamente a este pequeño que Dios
puso a mi cargo, creo que pude experimentar la profundidad del amor solo al mirar a sus ojos
y ver su sonrisa).
3. Discusión: No existe ningún tratamiento único que sea el mejor para todos los niños
con síndrome de Asperger. La mayoría de los expertos piensa que cuanto más temprano se inicie
el tratamiento, mejor.
Los programas para niños con síndrome de Asperger enseñan habilidades basándose en una serie
de pasos simples y empleando actividades altamente estructuradas. Las tareas o puntos
importantes se repiten con el tiempo para ayudar a reforzar ciertos comportamientos.
Los tipos de programas pueden abarcar:
Terapia cognitiva o psicoterapia para ayudar a los niños a manejar sus emociones,
comportamientos repetitivos y obsesiones.
Capacitación para los padres con el fin de enseñarles técnicas que pueden usarse en
casa.
Fisioterapia y terapia ocupacional para ayudar con las destrezas motoras y los problemas
sensoriales.
Entrenamiento en contactos sociales, que con frecuencia se enseñan en un grupo.
Logopedia y terapia del lenguaje para ayudar con la habilidad de la conversación cotidiana.
Conclusión: EL SINDROME DE ASPERGER Un plan de tratamiento solamente se
puede establecer cuando existe un trabajo conjunto entre padres, educadores y médicos. Sin embargo,
hay que considerar algunas reglas de protección para un niño con Síndrome Asperger, y que necesitan
ser cumplidas:
1. No les gusta que se rompa su rutina. Deben ser previamente preparados cuando haya que aplicar algún
cambio en su vida.
2. Se deben aplicar las reglas con mucho cuidado y con cierta flexibilidad.
3. Utilizar las áreas de aprendizaje que le interesen. Los profesores deben aprovechar a tope las áreas que
despierten el interés del niño, e intentar que las enseñanzas sean concretas y objetivas.
4. Se puede recompensar con actividades que interesen al niño cuando él haya realizado alguna tarea de
forma satisfactoria.
5. Utilizar las herramientas visuales en la educación de estos niños porque suelen responder muy bien a
las mismas.
6. Evitar la confrontación. Ellos no entienden muestras rígidas de autoridad o enfado. Se pueden volver
inflexibles y testarudos.
7. Hay que enseñarles a que hagan amigos, fomentando su participación en grupo, y reforzando a los
compañeros que también lo estimulen a participar. Normalmente, la medicación está contraindicada en el
proceso de tratamiento. Sin embargo, en situaciones concretas, como los estados de ansiedad depresión o de falta de atencion sí
la pueden utilizar, siempre bajo la orientación estricta del médico.
4. Referencias bibliográficas:
BAttwood, T., (2007), Guía del Síndrome de Asperger.
Barcelona: Paidós.
Barón-Cohen, S., (2010), Autismo y Síndrome de Asperger.
Madrid: Psicología Alianza Editorial.
Relinchón, M., Hernández, J., Sotillo, M., (2008), Personas
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Garrigós, A., (2009), Historia de un síndrome de Asperger.
Mi hijo no es como los demás. Madrid:
Psylicom Distribuciones Editoriales.
Goldberg, E., (2001), El cerebro ejecutivo. Madrid: Editorial
Crítica.
Grandin, T. y Scariano, M., (1986), Atravesando las puertas
del autismo. Una historia de esperanza
y recuperación. Barcelona: Editorial Paidós.