El documento define la energía como la capacidad de la materia para producir trabajo en forma de movimiento, luz o calor. Explica que los recursos renovables pueden restaurarse naturalmente más rápido de lo que los humanos los consumen, mientras que los recursos no renovables no pueden producirse o regenerarse lo suficientemente rápido como para mantener su tasa de consumo. Además, describe la energía solar, eléctrica e hidroeléctrica como fuentes de energía renovables.