Lucrecia Pérez, una mujer dominicana pobre y negra, emigró a España en 1992 durante una época de alto desempleo. Fue asesinada en 1992 en un ataque racista por un policía y tres menores, convirtiéndose en la primera víctima de un crimen racista en España. Su muerte conmocionó al país y llevó a miles a las calles para manifestarse contra el racismo, sacando a la luz los mejores y peores aspectos de la sociedad española. Su legado sigue recordando la importancia de la conv