El documento habla sobre la importancia de la reconciliación para lograr una sociedad más justa e inclusiva. Señala que la convivencia social solo es posible si todos participan en un proceso continuo de conversión y reconciliación. Relata una parábola sobre cómo la lengua puede ser usada para construir o destruir, y enfatiza que la reconciliación requiere controlar el uso dañino de la lengua.