La tarjeta gráfica es una tarjeta de expansión que procesa los datos de la CPU para representarlos en un monitor. Se compone principalmente de la unidad de procesamiento gráfico (GPU), shaders, memoria gráfica y salidas como SVGA, DVI y HDMI para conectar el monitor. Ha evolucionado desde tarjetas de sólo texto en los años 80 hasta poder procesar grandes cantidades de datos y texturas de alta resolución en la actualidad.