Las estrellas son objetos de masas enormes entre 0,081 y 120-2002 masas solares. Mientras las reacciones nucleares ocurren en el núcleo, estas sostienen el equilibrio hidrostático de la estrella y le permiten mantener su brillo característico, según predijo Niels Bohr en su teoría de órbitas cuantificadas. La radiación estelar llega débil a la Tierra debido a la gran distancia, y es susceptible a distorsiones causadas por la turbulencia y diferencias de densidad en la atm