1. Lealtad a la doctrina adventista
Párrafo 28
Enseñar la doctrina y tratar con las mentes humanas es la tarea más
hermosa jamás confiada al hombre—Hay una obra pastoral que hacer, y
ésta significa reprobar y exhortar con toda longanimidad y doctrina; esto implica
que él debe presentar la Palabra de Dios, para mostrar dónde hay deficiencias.
Si hay algo en el carácter de los profesos seguidores de Cristo, el pastor debe
sentir ciertamente la preocupación por ello, y no mandar despóticamente sobre
la herencia del Señor. El tratar con mentes humanas es la tarea más hermosa
que jamás fuera confiada al hombre mortal.—El Evangelismo, 255, 256. {MPa
30.3}