La Ley 26.390 tiene como objetivo prohibir el trabajo infantil y proteger el trabajo adolescente. Establece las edades mínimas para trabajar, las condiciones y derechos de los menores, y responsabiliza a los empleadores por la salud y seguridad de los adolescentes. Busca fomentar el trabajo desde edades tempranas de forma que no afecte el desarrollo o educación de los menores.