Los barcos generan grandes cantidades de residuos acuáticos como entre 13,000 y 26,000 litros de aguas oleosas y 67 a 130 kilos de residuos tóxicos que muchas veces vierten directamente al mar. Además, liberan grandes cantidades de gases contaminantes a la atmósfera como óxidos de nitrógeno y azufre, dióxido de carbono y otros que causan miles de muertes prematuras y contribuyen significativamente al cambio climático.