Este documento discute los efectos negativos de la melomanía, o la tendencia a escuchar música en todo momento. Algunas consecuencias son que impide el diálogo, daña los oídos, y devalúa la cultura auténtica. También puede causar accidentes de tránsito y hacer que las personas pierdan el tiempo en lugar de participar en otras actividades significativas. El documento concluye instando a las personas a moderar su uso de la música.