Los Museos Capitolinos de Roma albergan una importante colección de arte clásico. Fueron fundados en el siglo XV cuando el Papa donó varias esculturas de bronce a la ciudad. Más tarde, en el siglo XVIII, se trasladó la colección al Palazzo Nuovo, creando el primer museo del mundo. Actualmente los Museos Capitolinos están formados por tres palacios interconectados que albergan obras maestras como la estatua ecuestre de Marco Aurelio y piezas de Constantino y Miguel Ángel.