El poema describe la muerte lenta de los sueños a través del caminar cansino de las penas negras. Los cantos se convierten en llantos ahogados detrás de un telón dorado que exhibe falsamente la obra teatral. Pedro desea ocultar y negar las letras escritas en el firmamento rosado y esconder los jardines secretos donde lucero y estrella fornicaron sin pausa. Al igual que Pilatos, se lava las manos pero no la conciencia. El poema finaliza indicando que todas las penas fermentan hasta consumirse