LINEAMIENTOS INICIO DEL AÑO LECTIVO 2024-2025.pptx
personajes del franquismo en la comunidad
1. Ramiro Ledesma Ramos, Profundo admirador de Hitler,articuló las bases del Nacional-
sindicalismo en España, doctrina estatalista partidaria de la planificación económica calificada
como sindicalismo nacional o fascismo a la española.
Para su difusión, de marzo a octubre de 1931 se sirvió de los 23 números del semanario «La
Conquista del Estado», reflejo de la italiana La conquista dello Stato, en ella propugnaba una
política parecida a la de los nazis. Inmediatamente después, y tras la creación de las JONS
(Juntas de Ofensiva Nacional–Sindicalista) y ya como aliado de Onésimo Redondo, Ledesma
Ramos comenzó un acercamiento a Falange Española, que le condujo al triunvirato, por fusión de
ambas formaciones políticas, de FE de las JONS junto a Julio Ruiz de Alda y José Antonio Primo
de Rivera en febrero de 1934. La unificación entre dichas organizaciones surgió de la iniciativa
del propio Ledesma Ramos, asistente al acto fundacional de Falange Española. Su entusiasmo
por Hitler, su oratoria demagógica y su indudable proclividad a los procedimientos violentos
convirtieron a las Juntas de Ofensiva Nacional–Sindicalista por él fundadas en el sector más
radical de la Falange posterior.
Sin embargo, Ledesma Ramos fue expulsado de la formación en enero de 1935, interpretándose
su salida desde los antiguos jonsistas como fruto de su disconformidad con la evolución de FE de
las JONS, próxima al reformismo burgués y alejado de la vía revolucionaria proletaria que decían
defender sus partidarios. La literatura falangista, al interpretar estas querellas, dio énfasis a las
diferencias teóricas y políticas; pero fundamentalmente fueron el resultado de las ambiciones
personales de ambos lados.
En cualquier caso, tras su salida llevó a cabo un intento fallido de reactivación de las JONS como
grupo independiente y se mantuvo claramente alejado de Falange, pese a que presentaría de
nuevo su ayuda a título personal a José Antonio Primo de Rivera en 1936.
Estallada la Guerra Civil Española, y detenido en la cárcel de las Ventas por su supuesta
vinculación con los sublevados, fue sacado de allí para ser fusilado en el cementerio de Aravaca.
Tal condición lo elevó al martirologio franquista, aunque su programa ideológico quedó condenado
al ostracismo e inaplicado por el propio Régimen.
Nació en el seno de una familia de propietarios agrícolas. Cursó el bachillerato en el colegio
vallisoletano de Nuestra Señora de Lourdes. Obtuvo por oposición una plaza de administrativo
en la Delegación de Hacienda de Salamanca, y en la universidad de esa ciudad cursó estudios
de Derecho, carrera en la que obtuvo la licenciatura en 1926. Tras terminar sus estudios
universitarios, se trasladó de nuevo a Valladolid para preparar la oposición al cuerpo de Abogados
del Estado, a la que se presentó al año siguiente, aunque sin éxito.
En 1927, gracias a la mediación de Ángel Herrera Oria, director del periódico católico El Debate,
obtuvo una plaza como lector de español en la Universidad de Mannheim, en Alemania. Es
posible que esta estancia en Alemania tuviese importancia en su futura carrera política, ya que por
entonces el Partido Nacionalsocialista Alemán estaba experimentando un fuerte crecimiento. En
octubre de 1928 regresó a España.
Inició su carrera política como líder del Sindicato de Cultivadores de Remolacha de Castilla la
Vieja, o "Sindicato Remolachero". En 1929 cumplió su servicio militar en Valladolid. Durante esta
época conoció a Mercedes Sanz-Bachiller Izquierdo, con la que contrajo matrimonio el 12 de
febrero de 1931.
Inicialmente vinculado al movimiento de Acción Católica, se distanció de esta organización, que
consideraba anclada en el liberalismo burgués. Tras la proclamación de la II República, fundó,
en agosto de 1931, un grupo político denominado Juntas Castellanas de Actuación Hispánica,
que rechazaba el sistema democrático y propugnaba la acción directa como medio para la
2. conquista del poder. Poco antes, en junio del mismo año, había fundado la revista que sería el
principal órgano de expresión de su movimiento, Libertad, en la que firmó varias soflamas contra
el marxismo, los judíos y el capitalismo burgués, y expresó su admiración por los regímenes
fascistas europeos.
En noviembre de ese mismo año, su organización se fundió con la que lideraba Ramiro Ledesma
Ramos, quien editaba la revista La Conquista del Estado. Resultado de esta fusión fueron las
JONS (Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista), que adoptaron como emblema el yugo y las
flechas que antaño eran el anagrama de los Reyes Católicos. Las JONS, cuyos estatutos se
aprobaron oficialmente el 30 de noviembre, estaban dirigidas por un Triunvirato Central, formado
por Onésimo Redondo, Ramiro Ledesma y Francisco Jiménez (más adelante sustituido por
Antonio Bermúdez Cañete).
El objetivo de este nuevo partido, declaradamente antimarxista, es la creación del Estado
Nacionalsindicalista, de carácter totalitario. Como método de acción propugnaban la acción
directa, y rechazaban el sistema electoral, por considerarlo "liberal-burgués" y corrupto. Aunque
Redondo había sido antes, en su época de Acción Católica, partidario de la monarquía, en 1931
no se oponía a la república como forma del estado. El órgano principal del partido continúa siendo
la revista Libertad, en el que, por esas fechas, Redondo publicó una traducción comentada del
famoso libelo antisemita Protocolos de los sabios de Sión.
En 1932 tomó parte en la fracasada sublevación del general Sanjurjo. Para evitar ser detenido,
cruzó la frontera y se exilió en Portugal, primero en Curia y luego en Oporto. Desde el exilio
impulsó la publicación de un nuevo semanario nacionalsindicalista, Igualdad, que apareció el 14
de noviembre de 1932, y al que Redondo envió desde su exilio portugués numerosos artículos
políticos.
En abril de 1933 creó, junto con Ledesma Ramos, una nueva revista, J.O.N.S., como órgano de
su partido. En octubre regresó a España y volvió a instalarse en Valladolid. Decidió presentarse
candidato a las elecciones legislativas del 19 de noviembre de 1933, pero a última hora retiró su
candidatura para evitar perjudicar a la derecha de la CEDA.
El 4 de marzo de 1934, en un acto celebrado en el Teatro Calderón de Valladolid, las J.O.N.S. se
fusionaron con Falange Española, el partido de José Antonio Primo de Rivera. El nuevo partido,
Falange Española de las JONS, quedó bajo la dirección de José Antonio Primo de Rivera, Ramiro
Ledesma y Julio Ruiz de Alda, con lo cual Redondo pasó a un segundo plano. Cuando en 1935
Ramiro Ledesma Ramos se separó del nuevo partido, Redondo optó sin embargo por permanecer
en Falange.
El 19 de marzo de 1936 fue detenido en Valladolid. Durante su reclusión permaneció en contacto
epistolar con el líder de su partido, José Antonio Primo de Rivera, también encarcelado. El 25
de junio fue trasladado a la cárcel de Ávila, de la que fue liberado el 18 de julio por los militares
sublevados al iniciarse la Guerra Civil Española. Se dirigió a Valladolid, donde formó y dirigió
durante los primeros días siguientes al alzamiento la denominada "patrulla del amanecer", que se
distinguía por fusilar a cerca de cuarenta personas diarias.Posteriormente, se puso a la cabeza de
un grupo armado de falangistas que marchó hacia Madrid y combatió en el Alto de los Leones. El
día 24 de julio, Onésimo, con dos compañeros de partido, llegó en automóvil al pueblo segoviano
de Labajos, que creía zona nacional, y murió en una emboscada organizada por un grupo de
milicianos. Según parece, identificó erróneamente como falangistas a militantes anarquistas de la
Confederación Nacional del Trabajo por el parecido de sus banderas, y murió acribillado.
José Antoio Girón.
José Antonio Girón de Velasco, conocido como el león de Fuengirola, (*Herrera de Pisuerga,
3. Palencia (España); 28 de agosto de 1911 Fuengirola, Málaga (Id.); 22 de agosto de 1995),
militante falangista de gran importancia durante la dictadura del general Francisco Franco (1939-
1975). Su padre, don Justo Girón Gutiérrez, abogado que no ejercía, era de Carrión, y su madre,
doña Clementina María Velasco Fernández de los Ríos, habia nacido en Herrera. Fue hijo único.
Ocupó el Ministerio de Trabajo entre 1941-1957, siendo además miembro del Consejo del Reino y
procurador en las cortes franquistas. Durante el tardofranquismo fue una de las voces del búnker,
sector político inmovilista dentro del régimen que se oponía a cualquier cambio en el sistema.
Su vida política comenzó a edad temprana, inscribiendose en las Juntas Castellanas de
Actuación Hispánica y siendo uno de los fundadores en 1934 de las Juntas de Ofensiva Nacional-
Sindicalista (JONS), partido político que unos años más tarde se fusionaría con la Falange
Española de José Antonio Primo de Rivera.[3] Durante la Guerra Civil Española luchó en la sierra
de Guadarrama al mando de una centuria de Falange. Hecho prisionero tras el asalto fallido a una
casamata enemiga, fue condenado a muerte y a punto de ser fusilado en un par de ocasiones.
Al terminar la guerra se le concedió la medalla militar individual, segunda condecoración en
importancia tras la Cruz Laureada de San Fernando.
Una vez instaurado el régimen de Francisco Franco, comenzó a ocupar cargos políticos de gran
importancia. Inicialmente fue delegado nacional de ex-combatientes entre 1939 y 1941, pero
especial relevancia cobraría como ministro de Trabajo entre 1941-1957. Su gestión ministerial
tendió en gran medida a aumentar el nivel de vida de la clase obrera en España. Entre estas
medidas debemos destacar la creación de universidades laborales, entre las que destacarón las
de Gijón, Córdoba, Sevilla, Zamora y Tarragona. Junto a esto, su otra actuación reseñable es
la de potenciar un sistema de seguridad social, cuyos objetivos eran cumplir las situaciones de
vejez, viudedad, orfandad, desempleo, jornada laboral reducida, vacaciones pagadas y una red de
asistencia sanitaria con atenciones médicas y hospitalarias. En definitiva, podemos considerarlo
como la "cara social" del régimen. Llegó incluso a donar la cantidad de 100.000 pesetas para la
reconstrucción de parte de la ciudad de Cádiz afectada en 1947 por una explosión de un depósito
de minas submarinas.
Pese a estas medidas y a pesar de la represión del régimen en materia laboral, la década de los
años 50 no estuvo exenta de conflictividad social. En 1956, Girón, ante el temor de una repetición
de la huelga de Barcelona de 1951, convocaría un consejo urgente de ministros con el fin de que
el gobierno aprobara una subida salarial del 23 %. Tal como indica el hispanista Paul Preston en
su obra Franco "Caudillo de España", estas medidas provocaron una fuerte discusión entre Girón
y el ministro de Comercio, Manuel Arburúa, que argumentaba que la medida provocaría graves
efectos inflacionistas (argumento que posteriormente fue confirmado). A pesar de aprobarse esta
subida, no fue suficiente para evitar una nueva escalada de huelgas, que comenzó en la industria
zapatera de Pamplona, extendiéndose a la industria siderúrgica vasca y a la minería asturiana.
En 1957 sería cesado ante el creciente protagonismo de los tecnócratas en el régimen, que
defendían políticas económicas capitalistas con el fin de modernizar España, pero sin cambiar
el régimen político. Retirado temporalmente de la arena política, se dedicó a sus negocios
urbanísticos y turísticos en la Costa del Sol, siendo considerado uno de los promotores de la
puesta en valor de aquella zona, en especial el municipio de Fuengirola (Málaga).
Durante el Tardofranquismo, Girón volvió a cobrar cierto protagonismo. En 1973, tras la muerte
del Presidente del Gobierno, almirante Luis Carrero Blanco, fue uno de los candidatos a suceder
al fallecido almirante, junto con Torcuato Fernández Miranda, Laureano López Rodó y Carlos
Arias Navarro. Fue elegido finalmente este último gracias al apoyo que tenía en la "camarilla de El
Pardo".
4. Girón durante el Tardofranquismo fue firme partidario del búnker, junto con figuras como los
generales "azules" Tomás García Rebull y Carlos Iniesta Cano. Este grupo, que tenía bastante
influencia sobre Franco, pretendió frenar cualquier atisbo de reforma dentro del régimen. Tuvieron
cierto éxito durante 1974, como el conocido "Gironazo", artículo que escribió Girón en el diario
Arriba contra el aperturista ministro de Información y Turismo Pío Cabanillas, que provocó
la destitución del ministro. Son también conocidas sus declaraciones como presidente de la
Asociación Nacional de Excombatientes, en las que textualmente decía: "No reconocemos otra
legitimidad que la del 18 de julio".
Sin embargo, pese a su influencia dentro del régimen, el búnker no pudo evitar las diversas
medidas aperturistas producidas en 1976 bajo la presidencia de Adolfo Suárez, culminando éstas
en la Ley para la Reforma Política, tras la cual el búnker quedaría prácticamente neutralizado.
Esta falta de protagonismo fue confirmada tras las elecciones de junio de 1977, cuando la
ultraderecha no obtuvo prácticamente representantes en el nuevo parlamento, quedando
reducida a grupúsculos callejeros protagonistas de ciertas acciones violentas. Pese al malestar
generado por algunos de estos acontecimientos (en especial la Matanza de Atocha, en enero
de 1977, y posteriormente el golpe militar del 23 de febrero), nunca pudo probarse la relación
de Girón con los mismos. Formó junto a Blas Piñar y Raimundo Fernández-Cuesta el grupo
denominado "Búnker", como formación que se consideraba sucesora legítima de la Obra política
del Caudillo, que había durado cuarenta años.