2. El primer aspecto que se debe conocer a la hora de empezar a pensar en
una planificación deportiva son los principios fundamentales de
la periodización deportiva propuestos por Matveyev (2), estas premisas son:
3. Diseño cíclico del entrenamiento: Todos los componentes que rodean el
proceso de entrenamiento se repiten y forman un ciclo.
Unidad de preparación general y especializada: Enfatiza la importancia de
realizar cargas específicas desde las primeras fases de la temporada, junto
con la necesidad de aplicar cargas generales durante la época de
competiciones.
4. Ondulación de las cargas: Tanto en unidades de entrenamiento a corto, como a
medio y largo plazo, es necesario alternar momentos de cargas altas con otros
de cargas bajas. Esta organización de las cargas es fundamental para evitar un
exceso de fatiga acumulada y mejorar la capacidad de adaptación del
organismo, además es una forma de evitar la monotonía.
Continuidad del entrenamiento: Los periodos de interrupción del
entrenamiento deben ser cuidadosamente planificados, evitando en la medida
de lo posible interrupciones esporádicas, muy perjudiciales para la mejora del
rendimiento.
5. Todo el proceso de planificación deportiva quedará definido por los
estímulos que se apliquen en el deportista, por este motivo antes de
continuar es fundamental describir los componentes que definen las cargas,
para ello se seguirá la definición de Navarro (5):
6. Naturaleza, es lo que se va a trabajar, puede ser general o específica. En función de la
capacidad de la carga para estimular al deportista tendrá además un potencial determinado.
Magnitud, viene definida por la intensidad, el volumen y la densidad.
Orientación, se refiere a la capacidad o cualidad que se pretende desarrollar y el sistema
energético requerido. Si se focaliza hacia un solo aspecto será selectiva, mientras que si se
trabajan varios se conocerá como carga de orientación compleja.
Organización, se refiere a la distribución en el tiempo de las cargas y sus interconexiones. Los
contenidos de entrenamiento se pueden diluir en todo un ciclo de
entrenamiento, cargas regulares, o concentrar, cargas concentradas. Además, en función de la
la relación de las cargas de diferente orientación, la interconexión puede
ser simultánea o secuencial.
8. LEV V. MATVEIEV
Este modelo es la base sobre la que se asienta la periodización moderna. Todos
los modelos alternativos que han ido surgiendo a lo largo de la historia han tenido
por objetivo mejorar las debilidades de la forma clásica. Bien sea mediante
propuestas que mejoren el sistema dentro del método tradicional o mediante la
creación de modelos alternativos que eliminen los aspectos considerados
negativos (1).
9. La planificación deportiva tradicional se basa en la aplicación de cargas
regulares, aumentando la especificidad de los contenidos de manera
progresiva a lo largo del macrociclo. Esta progresión no es lineal, ya que
siempre hay que tener en cuenta la premisa de ondulación de la carga
(Issurin, 2010).
10. El desarrollo de los contenidos de entrenamiento se busca de forma simultánea, teniendo el
desarrollo de varias capacidades como objetivo. Este aspecto hace que en atletas de élite el
estímulo que genera cada contenido no sea suficiente para lograr la mejora deseada, esto no
sucederá en atletas de menor nivel y experiencia.
11. Las diversas unidades que se utilizan para organizar la planificación deportiva bajo este
método fueron propuestas en la década de los ’60 por Matveyev (2, 4), y aún hoy están en
vigor, aunque en función del modelo que utilicemos la nomenclatura puede variar.
12. •Plan plurianual: Los más habituales son planes de 2 o 4 años, en
función del tiempo entre la competición más importante que tenga el
deportista como objetivo.
13. •Temporada (plan anual): Suele tener una duración de un año, y viene determinado por el
calendario competitivo. Antiguamente toda la planificación deportiva se orientaba a
conseguir un pico de forma a lo largo de toda la temporada, lo que llevaba a que el plan
anual y el macrociclo fueran la misma estructura. Actualmente, una temporada suele estar
compuesta por varios macrociclos. La temporada tiene unos objetivos operativos
concretos, y habitualmente el objetivo de mayor importancia se sitúa hacia el final de la
temporada.
14. Macrociclo: El macrociclo está dividido en periodos de entrenamiento, un primer
periodo preparatorio, alejado de las competiciones principales y con contenidos
prioritarios generales, un segundo periodo de trabajo específico y de competición, y un
último periodo de transición, que se usa como fase de regeneración para comenzar otro
macrociclo en condiciones óptimas.
Mesociclo: Es la unidad media de la planificación deportiva, suele durar entre 3 y 6
semanas, y existen distintos tipos en función de su objetivo. Cada mesociclo está
compuesto por una serie de microciclos que persiguen un objetivo común.
16. Microciclo: Suele durar 1 semana, aunque puede durar entre 3 y 9
días. Existen diferentes clases en función de la carga que
representen
Sesión: Es la unidad más pequeña, dura unas horas.
18. Alta concentración de las cargas de trabajo.
Número pequeño de contenidos de entrenamiento en cada
bloque. El 60-70% del tiempo de entrenamiento debe ir
enfocado a desarrollar 2 o 3 contenidos, usándose el tiempo
restante para cargas regenerativas, calentamientos y vueltas a
la calma.
Desarrollo consecutivo de algunos contenidos.
19. Clasificación adecuada de los tipos de mesociclo y utilización específica
de estos.
La propuesta del autor es la utilización del modelo ATR con 3 tipos de
mesociclos; acumulación, desarrollo de habilidades básicas, su duración
oscila entre las 2 y las 6 semanas; transformación desarrollo de
contenidos específicos, es el mesociclo de mayor carga y suele durar
entre 2 y 4 semanas; y realización, se basa en trabajo de recuperación y
optimización de cara a la competición, dura entre 7 y 15 días.
20. La unión de los 3 tipos de mesociclo formaría una etapa de entrenamiento, que deben
finalizar siempre con una competición. A partir de este momento adaptaremos la
nomenclatura de Navarro y cols (2010) para referirnos a dichas etapas, y las
denominaremos Unidades Cíclicas de Entrenamiento (UCEs).
Para lograr el rendimiento adecuado a lo largo de toda la temporada, y teniendo en
cuenta que bajo este modelo no se desarrollan más de 2 o 3 contenidos, debemos
conocer a la perfección el tiempo que dura el efecto residual de cada capacidad. De esta
manera escogeremos la organización secuencial de las cargas.
22. Son un paso intermedio entre el modelo de bloques y el
modelo tradicional. Las características principales de estos
modelos se pueden definir en:
23. Acentuación de un número pequeño de contenidos sobre el resto.
Número reducido de capacidades a desarrollar de forma simultánea.
Los contenidos se trabajan de forma simultánea, solapando las nuevas capacidades
sobre las anteriores.
El nivel de exigencia de las cargas es elevado.
Prevalece la orientación específica de la carga sobre la general.
Es un modelo recomendable para atletas ya formados.
Se pueden lograr un número mayor de picos de forma que con modelos tradicionales.
24.
25. La diferencia entre el modelo integrado y el modelo acentuado está en que en el primer
caso se plantea una duración de la naturaleza de la carga acentuada más corta que en el
segundo caso.
Es decir, en el método integrado se acentúa de forma consecutiva desde una naturaleza
más general, hacia una más específica, de tal manera que cada 6 o 12 semanas se forma
una UCE, desarrollando el rendimiento específico. Este ciclo se puede volver a repetir o
se pueden variar los contenidos concretos que se acentúan, logrando al final de 1 o más
UCEs completar un macrociclo.
26. Sin embargo, en el modelo acentuado, aunque cada poco tiempo varíe el
contenido principal, la naturaleza de este será más larga que en el caso
anterior. Cuando la progresión de la naturaleza llega desde contenidos
básicos hasta contenidos competitivos se finaliza un macrociclo.
27. ESTUDIO DE CASO
Painter, Haff, Ramsey, McBride, Triplett, Sands, Lamont, Stone y Stone
(7), siguiendo las ideas planteadas por Issurin (2010), realizaron un
estudio con un grupo de atletas de pista para comprobar la efectividad
de dos modelos de programación de la fuerza. En su investigación
dividieron la muestra de forma homogénea en dos grupos.
28. Un grupo entrenaba bajo el modelo de bloque, concentrando la orientación
de las cargas, mientras que otro grupo realizaba un entrenamiento
tradicional, variando la orientación del entrenamiento diariamente.
CONCLUSIÓN:
Los resultados del estudio concluyeron que la periodización por bloques era
más efectiva en el desarrollo de la fuerza que un modelo de periodización
más tradicional.
29. CASO - 2
Rønnestad, Ellefsen, Nygaard, Zacharoff, Vikmoen, Hansen y Hallén (8) compararon el
efecto de 12 semanas de entrenamiento con una periodización en bloque frente a
una tradicional. El estudio fue llevado a cabo por dos grupos de ciclistas bien
entrenados, llegando ambos grupos a acumular un volumen e intensidad total similar.
Las conclusiones que sacaron los autores es que la periodización en bloque
provoca una mayor adaptación del organismo que la tradicional, siendo una buena
alternativa para la planificación deportiva en disciplinas de resistencia.
30. Issurin muestra otros cinco estudios más realizados por diferentes autores en
deportes como kayak, canoa, esquí alpino y de fondo, biatlón y fútbol.
CONCLUSIÓN:
En todos estos casos los resultados muestran una mejora del rendimiento y de
parámetros relacionados con el mismo en cada deporte: potencia pico, VO2max,
potencia en el umbral ventilatorio, potencia aeróbica máxima o tiempo hasta el
agotamiento.
31. Adaptaciones de la carga en la planificación
deportiva
Escoger el modelo de planificación deportiva es necesario, además de
conocer las bondades y desventajas de cada modelo y las
características del deporte. Se tiene que considerar las diferentes
adaptaciones que tienen que sufrir los componentes de las cargas en
función de las características del deportista.
32.
33. BIBLIOGRAFÍA
1. García-Verdugo, M. y Landa, L.M. (2005). Atletismo: La preparación del corredor de fondo.
Madrid: Real Federación Española de Atletismo.
2. Issurin, V.B. (2010). New horizons for the methodology and physiology of training
periodization. Sports Medicine, 40(3), 189-206.
3. Issurin, V.B. (2014). Periodization training from ancient precursors to structured block
models. Kinesiology, 46.
4. Matveyev, L. (1981). Fundamentals of sports training. Moscú: Progress.
5. Navarro Valdivieso, F., Oca Gaia, A. y Rivas Feal, A. (2010). Planificación deportiva o
planificación del entrenamiento y su control. España: Cultiva Libros.
6. Navarro Valdivieso, F. (2003). Modelos de planificación deportiva según el deportista y el
deporte. Lecturas: Educación Física y Deportes, (67), 41.
34. 7. Painter, K., Haff, G., Ramsey, M., McBride, J., Triplett, T., Sands, W., Stone, M. (2012).
Strength gains: Block versus daily undulating periodization weight training among track and
field athletes. International Journal of Sports Physiology and Performance, 7(2), 161-169
8. Rønnestad, B.R., Ellefsen, S., Nygaard, H., Zacharoff, E.E., Vikmoen, O., Hansen, J., & Hallén,
J. (2014). Effects of 12 weeks of block periodization on performance and performance
indices in well‐trained cyclists. Scandinavian Journal of Medicine & Science in Sports, 24(2),
327-335.
9. Vasconcelos, A. (2000). Planificación deportiva y organización del entrenamiento
deportivo. Barcelona: Paidotribo.