Un columnista económico alemán predice que la economía de Estados Unidos entrará en recesión en 2017, afectando la economía mundial, especialmente la de Europa. Mientras tanto, la OCDE estima que el crecimiento económico de Estados Unidos disminuirá este año pero se acelerará ligeramente en 2017. Aunque los riesgos de recesión son bajos, existen desafíos a largo plazo como la baja productividad que deben abordarse.

1. La "súper economía" de Estados Unidos, que experimenta
su octavo año consecutivo de crecimiento, entrará en
recesión en 2017, lo que afectará la economía mundial,
especialmente a la de Europa, predice el columnista
económico del diario alemán 'Die Welt', Holger Zschapitz.
"La recuperación económica en la historia estadounidense
duró un máximo de 9 años, por eso se espera una recesión
de nuevo en 2017 a más tardar", opina el columnista, que
subraya que el ciclo de crecimiento económico promedio
dura cinco años y que viene seguido de recesión.
"En 2017 se espera una nueva recesión económica en
Estado Unidos"
Según el economista, la recesión de la economía
estadounidense es más peligrosa para Europa, donde
además del problema de los refugiados y la amenaza del
terrorismo, existe una gran probabilidad de que al menos
un país salga de la Unión Europea.
"La probabilidad de que Finlandia salga de la zona euro
aumentó un 4 por ciento", advierte. A ello se una la
preocupación de los inversores ante la posible salida de
Reino Unido de la eurozona.

2. El grupo con sede en París y conformado por 34 naciones
dijo el jueves que el crecimiento económico de Estados
Unidos, medido por su producto interno bruto, disminuirá
este año a 1,8%, pero se acelerará ligeramente en 2017 a
2,2%.
La OCDE agregó que los riegos de una recesión en Estados
Unidos son "una perspectiva de probabilidad baja", pero
señaló varios retos a largo plazo que enfrenta la nación.
Recomendó inversiones bien diseñadas en innovación,
infraestructura y en el mejoramiento de capacidades
laborales como un medio para combatir un prolongado
período de crecimiento débil en la productividad del
trabajador.
El aumento en el gasto en inversiones atacaría la
desaceleración en la productividad y ayudaría además a
aliviar otros problemas como el aumento en la inequidad en
ingresos, según el informe.
"Siete años después de la crisis financiera, Estados Unidos
está registrando una recuperación", dijo la OCDE. "La
recuperación económica de Estados Unidos, aunque
modesta en términos históricos, ha sido una de las más
fuertes en la OCDE".
La Gran Recesión de 2007-2009, que incluyó la peor crisis
financiera desde la década de 1930, terminó en junio de
2009. La economía ha crecido desde ese momento, pero a
tasas anuales modestas que han promediado alrededor de

3. 2,1% en los últimos siete años. Ese es el crecimiento
económico más débil desde el período posterior a la
Segunda Guerra Mundial. Pero, no obstante, es más fuerte
que el de otras de las principales economías en Europa y de
Japón, que se han rezagado frente a Estados Unidos en
creación de empleos y crecimiento.
La OCDE atribuyó el crecimiento lento en Estados Unidos a
una variedad de factores que incluyen la severidad de la
recesión. Aunque el crecimiento ha sido lento, la
recuperación ha empujado la producción arriba de los
niveles previos a la recesión.
La OCDE dijo que los riesgos de una nueva recesión en el
próximo par de años son mínimos, pero citó algunos riesgos
de baja probabilidad que, de ocurrir, podrían poner en
peligro la expansión.
Esos retos van desde un desplome del mercado financiero a
una paralización política que pudiera incrementar el riesgo
de que el país caiga en incumplimiento de pagos en la deuda
del gobierno. Un agravamiento de las tensiones geopolíticas
o amenazas terroristas también podrían socavar la
confianza del consumidor.