Los esteroides son compuestos orgánicos derivados del esterano que se componen de carbono e hidrógeno formando cuatro anillos fusionados. Los esteroides anabólicos pueden causar efectos adversos en el hígado y otros órganos, especialmente cuando se administran por vía oral. Estudios han mostrado que el tratamiento con esteroides anabólicos reduce la función del hígado y puede causar colestasis hepática e ictericia.