Ecuador se convirtió en el primer productor mundial de banano debido a la creciente demanda en Europa y Estados Unidos y para evitar los impactos de plagas y huracanes que afectaban a las plantaciones centroamericanas. La política del gobierno ecuatoriano, incluyendo créditos y obras de infraestructura, junto con la mano de obra barata y tierra disponible, crearon las condiciones para el éxito de la industria bananera en Ecuador, la cual fue el eje de su economía hasta los años 1970 cuando fue reemplazada por el