El documento presenta tres dilemas éticos enfrentados por arquitectos. El primero rechazó un proyecto porque el cliente no quería realizar los trámites requeridos. El segundo se negó a sobornar a un funcionario para agilizar un permiso. El tercero hizo firmar a una cliente una carta en la que ella asumía la responsabilidad legal por no tramitar los permisos necesarios.

1. Nombre: Néstor Martínez Mora
Edad: 43 años
Profesión: Arquitecto
Tiempo Laborando: 18 años
DILEMA ÉTICO
“Recién me titule de la Licenciatura tuve la oportunidad de recibir mi primer
proyecto como Arquitecto, al platicar con mi cliente le establecí todo lo que se
tenia que realizar para que el proyecto pudiera llevarse a cabo, todo iba muy bien
hasta hacer mención en los trámites que se tenían que llevar acabo, en este punto
el señor me menciono que él pensaba que no hacia falta hacer tanto “alboroto”
con esas cosas ya que no las sentía necesarias. Le recalque la importancia que
tenían, pero él simplemente no estaba dispuesto a solventar el tiempo y dinero
que absorbe este procedimiento. A pesar de haber estado muy emocionado,
puesto que era mi primera obra, con toda la pena del mundo me vi obligado a
rechazar la obra, pues no podía comprometer mi trabajo con una responsabilidad
de ese tamaño, ya que como bien saben, el tema de los trámites, papeleos y todas
esas cosas es muy delicado y hasta cierto punto conflictivo, pero siempre
necesario.“

2. Nombre: Vicente Emilio Ponce Cano
Edad: 44 años
Profesión: Mtro. Arquitecto.
Tiempo Laborando: 20 años
DILEMA ÉTICO
“Hace tiempo estuve a cargo de una obra, obviamente lo primero que se debe
hacer es empezar con la documentación necesaria para poder comenzar con los
trabajos, me presente en la dependencia correspondiente para llevar a cabo la
alineación y número oficial de la obra, pero como es costumbre me retardaron
mucho el proceso y los trabajos se estaban atrasando más del tiempo en el que se
habían programado. Me presente de nueva cuenta para checar el proceso y
seguía igual, la persona que me atendía en ese momento se dio cuenta de mi
desesperación y muy descaradamente me dijo que una solución rápida era ofrecer
cierta cantidad de dinero para acelerar el proceso. He de confesar que lo pensé
por unos segundos, pero después me sentí un tanto indignado y rechace la
propuesta, obviamente, tuve que esperar lo mucho tiempo más para recibir la
solución de mi trámite.”

3. Nombre: Juan Bosco Loza Palacios
Edad: ¿?
Profesión: Arquitecto
Tiempo Laborando: 21 años
DILEMA ÉTICO
“Una señora me pidió que hiciera el proyecto de su casa, una vez que se
terminaron de ver los detalles del diseño y de más, le comente acerca de los
permisos que se debían de sacar, pero ella me dijo que no hacían falta puesto que
ella tenía contactos en gobierno y que no pasaba nada, mi solución fue hacerla
firmar una responsiva donde yo me deslindaba de todo problema legal que se
pudiera presentar en la obra ya que yo ya había indicado que era lo que se tenía
que hacer y en caso de algún problema ella era la única responsable de éste.”