La compañía recibió una propuesta de una constructora mexicana para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de un proyecto de vivienda que superaba el umbral permitido. La compañía propuso el uso de paneles solares y baterías de almacenamiento para reducir el consumo de electricidad y gas natural. Esto costaría 16 mil pesos por casa pero ahorraría 300 pesos mensuales por reducciones de emisiones, recuperando la inversión en 4.5 años.