Qué lleva a un adolescente a grabar sus vídeos sexuales
1. ¿QUÉ LLEVA A UN ADOLESCENTE A
GRABAR SUS VÍDEOS SEXUALES?
En la proliferación de contenidos donde los adolescentes se graban
realizando prácticas sexuales que luego envían (conocido como «sexting»),
los avances tecnológicos y la democratización de la Red juegan un papel muy
importante. Así lo cree Jorge Flores, informático y director de «Pantallas
Amigas», una iniciativa dedicada al fomento del uso seguro y saludable de
las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) desde 2004. «Los
teléfonos inteligentes, las tarifas planas o la buena calidad de conexión son
catalizadores para estos fenómenos», explica Flores. «Internet ha puesto
contenidos adultos al alcance de los adolescentes, que han terminado por
normalizar lo que ven en ellos», añade antes de afirmar que, aunque «se
están haciendo esfuerzos» por combatir estas prácticas, «falta
coordinación». También comenta las
dificultades con las que se
encuentran cuando quieren impartir
formación en colegios e institutos:
«Los centros educativos son muy
rígidos y el profesorado no suele
estar preparado para estas
cuestiones».
A pesar de la idea generalizada de las habilidades de los adolescentes con la
tecnología, Flores desmiente esta máxima y cuenta que «saben dónde hay
que apretar para tener lo que les interesa, pero poco más». Un falso
mito que asocia a que los padres conocen «más bien poco» las herramientas
digitales; algo que, a su juicio, habría que cambiar, pidiéndoles «ese
esfuerzo». Respecto al uso de las aplicaciones, este informático afirma que
las redes sociales viven un momento «de decadencia» en este sector:
«Prefieren mensajería instantánea o Twitter porque ahí todo va mucho más
rápido». Una bomba de relojería si tenemos en cuenta que estos
adolescentes carecen de «la madurez emocional» necesaria para afrontar
«las consecuencias de sus actos», según explica Enrique Echeburúa,
catedrático de Psicología Clínica en la Universidad del País Vasco. «La gente
ha distorsionado lo público, lo privado y lo íntimo, convirtiendo las redes
2. sociales en un patio de vecinos donde esa privacidad circula por la red. En
eso, los adolescentes son mucho más vulnerables», añade.
CONSECUENCIAS: ESTRÉS Y ANSIEDAD
En opinión de María Ángeles Pérez, psicóloga que trabaja en la Oficina de
asistencia a las víctimas de delitos violentos y contra libertad sexual de
Salamanca, los factores que provocan estas acciones son «la ambición de
conseguir reconocimiento y notoriedad en un momento de necesidad de
identificación con el grupo, así como una sensación de autosuficiencia».
Para esta especialista, la «sexualización precoz» hace que los adolescentes
tengan conductas «impropias de su edad». Un factor presente en mayor
medida en las chicas, pues su madurez llega «antes que en los chicos»;
hecho que puede derivar en que estos las vean «como un objeto,
desencadenando conductas machistas».
En cuanto a cómo afecta una situación así en el protagonista cuando toma
conciencia de lo ocurrido, esta psicóloga afirma que siente «culpa por
sentirse traicionado, vergüenza por la humillación que supone e indefensión
por un contenido íntimo que no puede controlar». Un cuadro psicológico
que también puede presentar «altos niveles de ansiedad por el miedo a las
consecuencias». A pesar de ello, hay métodos para que una experiencia así
no deje secuelas: «Si se trabaja adecuadamente con la persona y su
familia, se supera la situación. Lo importante es ponerse en manos de un
profesional que busque los motivos por los que ocurrió y cree las estrategias
oportunas para que no vuelva a
ocurrir». Para esto, «desde hace
más de una década», tanto la
Policía como la Guardia Civil
ofrecen la información necesaria
para los afectados, así como una
serie de recursos «gratuitos» a
los que todo el mundo puede
acceder por ser «un derecho».
3. En cualquier caso, esta experta avisa que «no se puede entregar un
teléfono móvil a un menor sin explicarle antes cómo utilizar
correctamente estas tecnologías». Algo en lo que también coincide Jorge
Flores: «Los padres han de recorrer este camino junto a sus hijos».
En mi opinión, los padres en casa y los docentes en los centros escolares,
deberían vigilar el uso que haces de internet, ya que el “no control” de esta
herramienta permite que muchos adolescentes lo utilicen sin ningún miedo ni
reparo y mucho menos sin saber que consecuencia puede acarrear su acto.
Además de tener un control sobre las páginas que visita o por las que
navega, se les debe explicar el uso de estas herramientas de la información
y la comunicación, como sacar un buen provecho de ellas y como utilizarlas
adecuadamente.
Muchas de los actos de los adolescenteses culpa de que sus familias no se
han sentado previamente a hablar con ellos y avisarle de los riesgos que
corre con determinadas acciones, uniéndose a este factor la entrega de un
dispositivo móvil a cualquier adolescente o menos sin importar la edad y su
capacidad para utilizar estos medios con responsabilidad y madurez.
Hablar con sus hijos es fundamental para evitar este tipos de sucesos.