SSL proporciona autenticación y privacidad entre extremos en Internet mediante el uso de criptografía. Implica negociar el algoritmo a usar, intercambiar claves públicas y certificados digitales, y cifrar el tráfico usando cifrado simétrico. Uno de sus usos más importantes es junto a HTTP para formar HTTPS, que asegura páginas web para comercio electrónico usando certificados de clave pública.