Este documento describe las cualidades de un verdadero educador y su rol en la comunidad. Un educador debe ser paciente, aceptar los reveses, distinguir lo esencial de lo secundario, estar dispuesto a aprender, y ser un ejemplo positivo. También debe estudiar la comunidad donde enseña para comprender sus costumbres, problemas y recursos, y trabajar con los padres y líderes comunitarios para promover el cambio.