Los primeros humanos eran nómadas que cazaban, pescaban y recolectaban para sobrevivir. Con el desarrollo de la agricultura y la domesticación de animales, los humanos se volvieron sedentarios. A mediados del siglo XVIII, la humanidad buscó nuevas rutas agrícolas y se desarrollaron innovaciones como la máquina de vapor. Las actividades agrícolas, ganaderas, forestales y pesqueras se organizaron para transformar los productos en bienes.