El Rosario Bíblico: Contemplar la vida de Jesús a través de la Palabra
1. introduccion
El Rosario Bíblico
La oracion sencilla de los hijos de Dios Corona de gozo: La Anunciación
La Infancia de Jesús La Visitación
Rezamos el santo Rosario para contemplar los acontecimientos más (lunes y sábados) La Navidad
importantes de la vida de Jesús. Queremos ver, a través de los ojos de La Presentación
María, «todo lo que Jesús hizo y enseñó desde el principio, hasta el día El Hallazgo en el Templo
en que fue llevado al cielo» (Hch 1:1-2).
Corona de luz: El Bautismo
Es otro modo de cumplir lo que nos pidió el Señor cuando nos El Ministerio Público Las Bodas de Caná
dijo: «haced esto en memoria de Mí» (Lc 22:19). Y lo hacemos al ritmo (jueves) La Predicación del Reino
acompasado de oraciones sencillas y profundas, como las de un niño. La Transfiguración
Para contemplar cada acontecimiento, rezamos un «Padre nuestro», La Eucaristía
diez «Dios te salve, María» y un «Gloria». A esto le llamamos una
«década» (de la palabra «diez»). Corona de dolor: La Agonía
La Pasión del Señor La flagelación
A su vez, resumimos en cinco décadas, o misterios, un período de la (martes y viernes) La Coronación de Espinas
vida de Cristo. Y a esto le llamamos «corona» del Rosario. La primera La Vía Dolorosa
corona del Rosario son las cinco décadas o misterios «de gozo», que La Crucifixión
resumen su infancia. La segunda corona son los cinco misterios o
décadas «de luz», que resumen su ministerio público entre los hombres, Corona de gloria La Resurrección
y que fue agregada al Rosario por el Papa Juan Pablo II para quien lo La Vida Triunfante La Ascensión
desee. La tercera corona son los cinco misterios o décadas de «dolor», (domingos y miércoles) Pentecostés
que resumen la pasión del Señor. La cuarta y última corona son los La Asunción
cinco misterios de «gloria», que resumen la vida triunfante de Cristo. La Coronación
Es costumbre rezar en cada día de la semana una corona del Rosario,
según el siguiente esquema:
2. Una contemplacion accesible a todos Para ayudarnos a conocer mejor su vida y el sentido de lo que iba
Cuando decimos que rezar el Rosario es contemplar la vida de Jesús, ocurriendo, hemos incluído, después del anuncio de cada misterio del
puede que la palabra «contemplar» nos suene a algo sublime y accesible Rosario, explicaciones sencillas sobre los hechos históricos a que se
sólo a grandes místicos. Pero no es una tarea que deba resultarnos refieren y su significado a la luz de la fe. Se trata de lecturas optativas
difícil. Porque contemplar no es otra cosa que «ver»: es considerar u que están basadas en la estupenda síntesis doctrinal que nos ofrece
observar con amor y admiración. Al mirar con amor a alguien o a algo, el Catecismo de la Iglesia Católica y el Magisterio. Tal vez convenga
esa realidad comienza a abrirse a nuestra mirada y vamos descubriendo leerlas hasta que hayamos asimilado la riqueza de sus enseñanzas y eso
su verdadera esencia y el significado de su misterio. nos sirva para alimento de los futuros Rosarios.
Como Maria
Puesto que el Rosario es contemplar a Jesús «a través de los ojos de
María», esta contemplación es tan atractiva como popular –todos Aunque nos esforcemos, muchos tenemos dificultad en mantenernos
sabemos por experiencia que María, nuestra Madre, hace las cosas no atentos durante el Rosario. Para ayudarnos a mejorar la calidad de
sólo más fáciles, sino mucho mejores. En esta contemplación buscamos nuestra oración, nos hará un bien enorme rezar el Rosario no sólo con
conocer cada vez más la vida de Jesús para poder seguir su ejemplo María, sino como María.
y vivir sus misterios en nosotros, lo que a su vez nos permite ir
participando cada vez más de su santidad y llenarnos de gozo espiritual Examinemos las palabras de nuestra Señora en los Evangelios. Pronto
–y en esto, también, seguimos a María, que atesoraba en su corazón descubriremos que ella comprendía y expresaba todo lo que iba
todo lo que decía o hacía Jesús. sucediendo en términos de la Biblia, tal como ella la había aprendido
en la liturgia del Templo y en las sinagogas de Israel. Nosotros,
No amamos lo que no conocemos
también, podemos participar mejor de los misterios de Cristo si, como
Pero, ¿cómo podemos meditar los acontecimientos de la vida del María, meditamos los misterios del Rosario a la luz de la Biblia y
Señor si no los conocemos? En otras épocas, una catequesis muy de la liturgia. Es el consejo que nos daba el Papa Juan Pablo II en su
fuerte y un arte sagrado vibrante hacían que los cristianos, e incluso encíclica Rosarium Virginis Mariæ, de que redescubriéramos el Rosario
los nos cristianos, supieran un mínimo acerca de los episodios que «a la luz de las Escrituras, en armonía con la liturgia y en el contexto
nos narran los Evangelios. Hoy, en cambio, se ignoran aún los hechos de nuestra vida cotidiana».
más fundamentales. O, peor, se llega a tergiversar o a trivializar las
verdades más importantes sobre el misterio de su Persona divino- ¿No son acaso la Biblia y la liturgia los modelos perfectos de oración
humana, reduciendo a Jesucristo con frecuencia al personaje simpático del Pueblo de Dios, la raíz y coronación de la contemplación cristiana?
de moda: «el flaco», «el barbudo», «el joven rebelde», «el que me hace Si seguimos el consejo del Papa y fortalecemos el rezo del Rosario con
parar de sufrir», etcétera. fuertes raíces litúrgicas y bíblicas, potenciaremos sin duda su capacidad
3. para promover en nosotros la admiración y la fascinación, y eso nos de las que hablan –aumentando así la calidad de nuestra oración y
llevará a una contemplación más pura, intensa y sostenida –como las disminuyendo la cantidad de nuestras distracciones.
de un niño.
Cada antifona, un icono
Textos importantes de la Biblia
Al estar tomada directamente de la Palabra de Dios, cada «antífona»
En su origen, el santo Rosario surgió como un sustituto para aquellos del Rosario bíblico es como un pequeño ícono del misterio divino –
que no podían contemplar la vida de Cristo a través del rezo frecuente algo que se puede contemplar con un amor que nunca se fatiga, porque
de la Liturgia de las Horas, de modo que cada uno de los ciento nunca agota lo que mira, y que transforma y diviniza con su mensaje.
cincuenta «Dios te salve, María» reemplazase a los ciento cincuenta
salmos que se rezan en el Oficio Divino (antes había sólo tres «coronas» Seguramente será preocupante que esta ayuda, aunque pueda resultar
del Rosario: los misterios de gozo, de dolor y de gloria). muy positiva, hará que el rezo de una corona del Rosario lleve
demasiado tiempo.
Siguiendo este concepto litúrgico, tiene sentido que, para enriquecer
la contemplación, utilicemos a modo de las «antífonas» de las Horas Pero, por una parte, los textos bíblicos, en armonía con el estilo de las
del Oficio textos clave de la Biblia que nos ayuden a profundizar antífonas de la liturgia, están muy sintetizados para que, manteniendo
el significado de los acontecimientos que meditamos, y que precedan el mensaje esencial de todo un pensamiento, lo hagan de modo
a cada «Padre nuestro» y «Dios te salve, María», como las antífonas brevísimo, rico en color y en ritmo, para que puedan interiorizarse
preceden a los salmos en la liturgia. con facilidad. Por otra parte, se pueden rezar menos décadas cuando
seguimos el Rosario bíblico, dedicando el mismo tiempo de siempre.
Una tradicion original
Cuando volvamos a rezar el Rosario de modo habitual, lo haremos
La idea de este Rosario bíblico-litúrgico está basada en una tradición con más alimento catequético y bíblico para sostener y acrecentar la
probada y de larga data. Durante la Edad Media, cuando surgió la atención y la calidad de las futuras contemplaciones.
devoción del Rosario, la gente solía rezarlo agregando a cada «Dios
Antiguo y Nuevo Testamento
te salve, María» una breve reflexión que los ayudara a entrar más
profundamente en el misterio de cada década. En el Rosario bíblico, Las antífonas que hemos escogido no se limitan a reproducir el pasaje
esa reflexión breve está tomada de un texto inspirado de la Palabra de evangélico que narra cada misterio. Más bien, se ha buscado iluminar
Dios, del Antiguo o del Nuevo Testamento. el episodio evangélico con textos tomados de otras partes de la Biblia.
Por ejemplo, cuando se trata de la Anunciación, las antífonas no están
Como María, sería estupendo que podamos rumiar estos pasajes tomadas sólo del pasaje correspondiente del Evangelio de san Lucas que
importantes de la Biblia, atesorando en nuestro corazón las realidades cuenta la aparición del Arcángel Gabriel a María, sino que también
4. hay textos seleccionados de otros libros de las Escrituras. Así iremos renovando la capacidad de contemplar el rostro de nuestro
Señor Jesucristo como un niño, a través de los ojos de nuestra Madre
Este tipo de enfoque está inspirado y en armonía con el modo de –los ojos purísimos de la más grande contemplativa: la hija de Sión
operar de la liturgia y de las Escrituras, en las que la anticipación y de quince años que observaba a su bebé en el pesebre; la Mujer que
el cumplimiento, la sombra y la realidad, la figura y lo figurado, la acompañaba con su mirada al Mensajero de la paz; la Corredentora
profecía y la realización, la asociación de imágenes y los paralelismos que no perdía de vista el cuerpo inmolado de su Hijo y que, Virgen
son una constante que alimenta sin saturar al espíritu. En efecto, en Madre de los hijos de la Iglesia, fijaba su mirada anhelante y llena de
la Biblia y en la liturgia, los acontecimientos de la vida de Cristo anticipación, más allá de la soledad y las sombras de la Cruz, en la luz
están anunciados y prefigurados –y, a su vez, son iluminados– por las gloriosa del amanecer, el Primer Día de la nueva Creación.
historias y profecías del Antiguo Testamento, del mismo modo que
la vida de Cristo, a su vez, anticipa e ilumina la vida de la Iglesia
y de cada cristiano, aquí en la tierra como en el cielo. La verdad
que encierran los pasajes de la Biblia no se agota: es una fuente que
cada vez se va haciendo más grande, hasta transformarse en un río
incontenible de verdad y belleza.
El Rosario como acceso a las fuentes cristianas
El Rosario bíblico puede ayudar a que esta devoción popular, la más
extendida entre el Pueblo de Dios, vaya familiarizando a los que la
rezan con los textos y los modos de oración de la Biblia y la liturgia,
que son las fuentes primarias e indispensables del auténtico espíritu
cristiano (cf. Sacrosanctum Concilium, 10; San Pío X, Motu Propio
sobre la música sagrada).
Al «redescubrir el Rosario a la luz de las Escrituras, en armonía con la
liturgia y en el contexto de nuestra vida cotidiana», cada contemplación
de la vida de Cristo nos permitirá apreciar más los acontecimientos de
su vida, imitar mejor los misterios que contienen y obtener las gracias
que prometen (cf. Oración colecta de la Misa de Nuestra Señora del
Santo Rosario, Misal Romano, Forma Extraordinaria, 7 de octubre).