Rousseau desarrolló su pensamiento en el siglo XVIII en Francia durante un período de enfrentamiento entre la burguesía y la nobleza que condujo a la Revolución Francesa. Propuso que el orden social debe estar de acuerdo con las leyes naturales. Consideraba que la educación, a través de la observación y experimentación del niño en la naturaleza, era el camino para comprender el mundo. Criticó la educación tradicional de la época por ser incapaz de cumplir con esta labor según los principios naturalistas.