El Sahara es el desierto más grande del mundo ubicado en el norte y centro de África. A pesar de las difíciles condiciones de vida, el desierto no está vacío ya que pequeños animales y plantas logran sobrevivir con pocas lluvias. La población del Sahara no es uniforme y está compuesta por pueblos nómadas de diversas culturas que se mueven de un lugar a otro siguiendo el pasto y agua para sus animales como camellos, los cuales son indispensables para la supervivencia en el desierto.