El documento resume el Salmo 42 de la Biblia. El salmista, desterrado lejos del templo, suplica a Dios que lo defienda de sus enemigos y lo guíe de regreso al monte santo y la morada de Dios para alabarlo. Aunque sufre ahora, tiene la certeza de volver a alabar a Dios como su salvador y fuente de alegría.